Investigaciones recientes han alcanzado un progreso notable en el ámbito de la comunicación cuántica, logrando transmitir información de manera efectiva a lo largo de 250 kilómetros utilizando fibra óptica convencional. Este logro se considera esencial para el avance de un internet cuántico que opere eficientemente sin requerir infraestructuras especializadas y costosas.
La tecnología cuántica, fundamentada en los principios de la mecánica cuántica, tiene el potencial de cambiar radicalmente el manejo de la información, brindando beneficios en rapidez y protección. No obstante, para que estas innovaciones sean prácticas en situaciones reales, es crucial desarrollar una red de comunicación que facilite el envío de datos a extensas distancias.
Hasta el momento, las comunicaciones cuánticas se han enfrentado a restricciones debido a la obligación de usar herramientas especializadas, tales como sistemas de refrigeración criogénica, que resultan ser costosos y difíciles de manejar. No obstante, un nuevo experimento llevado a cabo en Alemania ha probado que se puede preservar la coherencia de la información cuántica empleando cables de fibra óptica subterránea convencionales bajo condiciones normales del entorno.
El grupo de científicos, encabezado por un especialista de Toshiba, ha logrado este “hito” no solo en términos de distancia, sino también en cuanto a la excelencia de la comunicación obtenida. Este progreso es crucial para la estructura del futuro internet cuántico, de acuerdo con los expertos. La habilidad para enviar información cuántica de forma coherente mediante la infraestructura actual podría iniciar una nueva era de conectividad.
La comunicación cuántica utiliza cúbits, que son la unidad básica de información en la computación cuántica. A diferencia de los bits convencionales, los cúbits pueden representar múltiples estados simultáneamente, lo que les otorga una capacidad exponencialmente mayor. Sin embargo, son extremadamente frágiles y propensos a errores debido a sus interacciones con el entorno. Factores como la expansión y contracción de los cables de fibra óptica, provocados por cambios en la temperatura, pueden generar errores y hacer que se pierda la coherencia.
El éxito alcanzado no se restringe solo a la distancia, puesto que el grupo también ha conseguido conservar la consistencia en escenarios reales de comunicación, superando las restricciones de experimentos pasados efectuados en ambientes controlados de laboratorio. Este progreso simboliza un avance crucial hacia el desarrollo de redes de comunicación cuántica que sean viables y ampliables.
La relevancia de este avance va más allá de simplemente enviar datos. La capacidad de establecer redes cuánticas eficaces podría influir significativamente en la protección de las comunicaciones. La utilización de la distribución de claves cuánticas (QKD) se presenta como uno de los usos más prometedores de esta tecnología, al facilitar la creación de sistemas de encriptación teóricamente resistentes a ataques cibernéticos.
Además, este tipo de red permitirá conectar computadoras cuánticas, aumentando su potencial y capacidad de procesamiento. La implementación de redes cuánticas podría facilitar desarrollos en áreas como la inteligencia artificial, donde la capacidad de procesar grandes volúmenes de datos de manera rápida y segura es crucial.
Aunque se ha avanzado de manera entusiasmante, los científicos señalan que todavía estamos en una fase inicial de desarrollo. Este avance establece los fundamentos para futuras aplicaciones prácticas, pero todavía hay mucho trabajo por delante para integrar completamente la tecnología cuántica en la infraestructura actual de telecomunicaciones.